En mi caso, bastante apuradilla: en un par de semanas estamos de vacaciones y se nos vienen encima rematar un montón de proyectos y, cómo no, los benditos exámenes! Por eso, porque hay ya mucho estrés acumulado, hay que encontrar alguna manera de desahogar, y en mi caso, está siendo el brush lettering.
No sé si habéis oído hablar de ello, supongo que sí, pero para las que no os diré que algunos lo califican de hobby en sí y después de investigar un poco entiendo porqué: en primer lugar porque es alucinante crear cosas bonitas, en segundo lugar porque engancha, o sea que una vez que empiezas no ves el momento de parar; y en tercer lugar porque requiere mucha mucha mucha práctica, de hecho creo que es la única manera para llegar a conseguir una letra tan bonita como esta de Jenny Highsmith, por ejemplo:
Una cosa que me ha quedado clara es que los términos calligraphy, handwriting y brushlettering se refieren a cosas diferentes.
Por caligrafía se entiende el arte más tradicional de escribir con letra artística o el arte de escribir bonito a mano. Son muchísimos los tipos de fuentes que un buen calígrafo es capaz de reproducir, sólo se necesita una pluma, tinta líquida y muchísima práctica. En la version más popular, en los trazos ascendentes se aplica una presión muy ligera y en los trazos descendentes una presión mayor para hacer más grueso el trazo:
Las citas que vemos tan de moda en cartelería o tarjetas están escritas en lo que se llama modern calligraphy o handlettering, una versión fresca y relajada de esta clásica caligrafía:
El término handwriting se refiere literalmente a la letra escrita de una persona, que puede ser artística o no, bonita o no, pero que, de todas todas, es tan única como su huella dactilar. Tu letra te sale de manera espontánea al escribir cualquier texto, para hacer caligrafía, handlettering o brush lettering se requiere un esfuerzo artístico.
En este vídeo, Elsie de A beautiful Mess, se lo pasa pipa recreando su letra con diferentes útiles de escritura:
De todas formas, muchísima gente utiliza el término handwriting para referirse a una forma de embellecer tu propia letra recreando el efecto de la letra de caligrafía. No exige saber caligrafía ni ningún tipo de útil específico más que un rotulador. Este es el método más sencillo y el que yo llevo usando bastante tiempo. Consiste básicamente en "engordar" tus letras en los trazos descendentes y el efecto queda bastante mono.
Finalmente, y en el meollo de toda esta cuestión, está el brushlettering, que me tiene loca y no sólo a mi, muchísimas artistas y scraperas muy conocidas llevan tiempo rendidas antes las opciones de esta técnica de escritura. Se necesita un rotulador tipo Tombow Dual Pen, con punta larga y flexible, que nos permita jugar con la presión que aplicamos para crear ese efecto caligráfico.
La técnica es la misma: trazos ascendentes delgaditos, trazos descendentes más gruesos:
Hay muchísimos tutoriales y cursos en Internet, pero este de Destination Decoration es de los que a mi me han gustado: fotos, vídeos e imprimibles para empezar a practicar desde los trazos más básicos hasta las transiciones entre letras.
Otro tipo de herramienta muy útil para el brushlettering es el pincel de agua o "waterbrush pen" que se usa con acuarelas y con el que se consiguen resultados increíbles:
No es fácil, avisan, y algunos hablan de años de práctica, pero creo que es divertido aprender cosas nuevas y sobre todo si se pueden hacer cosas tan chulas como estas de Kwernerdesigns y Amy Tangerine respectivamente:
Espero que os toméis el post de hoy con calma porque me he pasado con los vídeos, os aseguro que me ha costado dejar algunos fuera!
Vamos a por la semana, está hechaa!
No hay comentarios:
Publicar un comentario